Era una mañana gris sobre un todavía amanecer que dejaba ver las delgadas sombras de su primitivo color dorado. Madrugué más de lo común para bajar a la cafetería de la esquina a por un café para mí y un batido de vainilla para él, nunca entendí por qué le gustaban tanto, aunque a decir verdad nunca entenderé muchas cosas de él.
Ya se había ido cuando subí. No quedó ni rastro de su presencia en aquel estudio que conseguimos alquilar a mitad de precio durante el otoño. Toda su ropa, sus zapatos, sus vinilos preferidos... se lo llevó todo.
No quise aceptarlo; no conseguía entender el por qué.
Sin embargo hoy, 23 días después, he conseguido abrir algo más los ojos y veo las cosas de un modo diferente, me doy cuenta del tiempo que llevaba planeando su huida. He aprendido a no culparme por sus errores y a tratar de hacer que el dolor se haga más indetectable con los días, pero es difícil.
Era más que probable que algún día tuviese que pagar por todo el placer y la alegría que el amor provoca. Y cuanto más intensamente amase más intenso sería el dolor futuro. Yo lo sabía, pero nadie puede aprender sin haber cometido errores antes.
La vida te dará y te quitará lo que más amas, pero hoy, a 23 días sin tí he conocido a alguien... alguien que siempre estuvo ahí para mí y a quien no supe darle la importancia que merece.
Soy yo y sin duda voy a darme una oportunidad.
https://www.youtube.com/watch?v=svlE0MLV3Vg&list=LLmUFQk7Jv5oqKQJsS4KwBcA&index=1 |
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias todos : )